Día Mundial del Refugiado

En el marco del Día Mundial de los Refugiados, conmemoramos los 40 años de la Declaración de Cartagena sobre Refugiados en América Latina. Esta declaración amplió la protección para quienes huyen de violencia, conflictos internos y violaciones masivas de derechos humanos. En nuestro boletín «Tiempo de Encuentros», exploramos la situación actual del refugio en Perú, América Latina y el Caribe, junto con los desafíos y oportunidades de «Cartagena +40».

Ideas principales del boletín informativo

Cécile Blouin

Durham University – Pontificia Universidad Católica del Perú

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Este año se celebran los 40 años de la Declaración de Cartagena sobre los Refugiados, un hito clave en la protección internacional en América Latina. Chile lidera consultas regionales para definir una nueva agenda que promueve la autosuficiencia de los refugiados y amplía el acceso al reasentamiento y otras vías complementarias.

Sin embargo, hay críticas sobre la efectividad de estas medidas frente a la compleja realidad de la movilidad humana en la región. Destaca la inclusión por primera vez de organizaciones lideradas por personas refugiadas en estos esfuerzos, representando una voz crucial en la protección de derechos en América Latina y el Caribe.

Valentina Cappelletti

Profesora-investigadora tenure track
Pontificia Universidad Católica del Perú

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En las últimas décadas, el concepto de refugio ha evolucionado significativamente, alejándose de su función original de protección ante violencia y crisis humanitarias para convertirse en un instrumento de gestión migratoria y regulación. Esta transformación desafía los principios de derechos humanos y solidaridad internacional, especialmente en un contexto de políticas migratorias restrictivas y desplazamientos forzados masivos.

En 2023, hubo 36.4 millones de refugiados y 6.1 millones de solicitantes de refugio en el mundo, con América Latina y el Caribe representando un tercio de las nuevas solicitudes. Sin embargo, las tasas de reconocimiento varían considerablemente entre países, siendo México y Perú importantes receptores con diferentes niveles de éxito en la protección de solicitantes.

Lucía Cristina Ortiz Domínguez

Profesora-investigadora posdoctoral

El Colegio Mexiquense, A.C.

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En respuesta al alto volumen de solicitudes, países como México y Perú restringen el acceso al refugio utilizando criterios de «vulnerabilidad extrema» como único método de evaluación. Esto ha llevado a colapsos en sus sistemas de refugio, creando prolongadas esperas burocráticas que actúan como disuasión.

En Tapachula, México, conocida como «Atrapachula», el refugio se emplea para contener flujos migratorios, mientras que Perú ha adoptado políticas restrictivas frente al éxodo venezolano, limitando opciones de regularización a través de la vulnerabilidad extrema. Este uso estratégico y expansivo del refugio refleja las tensiones en la gestión de la migración y el desplazamiento forzado, cuestionando la efectividad y ética de las políticas actuales y promoviendo alternativas más accesibles para la regularización temporal y permanente de las personas migrantes.

Yordi Ugaz

Abogado por la Universidad Antonio Ruiz de Montoya (Lima, Perú).

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El Día Mundial del Refugiado, cada 20 de junio, celebra la valentía de quienes se ven obligados a huir de conflictos y persecuciones. Según ACNUR, a finales de 2022, hubo 108.4 millones de personas desplazadas globalmente. En las Américas, 6.7 millones necesitan protección internacional, destacando que 6.1 millones son desplazados dentro del continente. Las comisiones nacionales para los refugiados (CONARES) desempeñan un papel crucial en la protección y asistencia de estos individuos, enfrentando desafíos debido al aumento de flujos y fortaleciendo sus mecanismos de protección.

María Teresa Urueña B.

Responsable de incidencia.
Red Jesuita con Migrantes – RJM LAC

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En los últimos siete años, América Latina y el Caribe han enfrentado una transformación significativa en su dinámica migratoria, destacando la salida forzada de casi ocho millones de venezolanos como un evento crucial. Países como Colombia, Perú y Brasil han acogido la mayoría de las personas necesitadas de protección internacional en la región, según la plataforma R4V.

La Declaración de Cartagena de 1984 sigue siendo fundamental en la región al ampliar los criterios para determinar la condición de persona refugiada, adaptándose a causas objetivas como la violencia estructural y políticas económicas restrictivas. Con 16 países adoptándola, continúa protegiendo a solicitantes de asilo, refugiados y apátridas, mientras que su revisión en 2024 busca abordar las causas actuales de migración y mejorar las condiciones para quienes buscan protección en la región.

Miluska Mas Espinoza

Especialista de Genero y VBG – HIAS Perú

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Las mujeres refugiadas y migrantes en Perú enfrentan múltiples barreras de género que dificultan su integración y desarrollo. Las niñas y adolescentes encuentran obstáculos para acceder a la educación, limitando sus oportunidades de crecimiento personal y profesional. La falta de recursos a menudo las obliga a abandonar la escuela para trabajar o cuidar de sus familias, mientras que el rol de cuidadoras adicionales les impide participar plenamente en la educación formal.

Las mujeres adultas enfrentan explotación laboral en trabajos informales o precarios, además de discriminación en el mercado laboral peruano basada en género, nacionalidad, y estatus migratorio. La discriminación y xenofobia complican aún más su integración, haciéndolas más vulnerables a la violencia de género y afectando su salud mental y bienestar psicológico. Esto les dificulta tomar decisiones autónomas sobre su salud, educación, trabajo y relaciones personales, y las expone a la exclusión social y el aislamiento.

Margiori Moraima Rios Ramos

Coordinadora Proyecto de la Mano con los Migrantes Cáritas Lima

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La crisis en Venezuela ha provocado un desplazamiento forzado durante más de 7 años hacia varios países de Latinoamérica. Sin embargo, las dificultades sociales y políticas en los países receptores han complicado tanto el tránsito como la estancia de esta población, exponiéndola a situaciones de violencia e inseguridad, especialmente para niños, niñas y adultos mayores.

A pesar de estas limitaciones, muchas familias continúan su travesía con la esperanza de encontrar mejores condiciones de vida en destinos como Perú, que ha sido tanto lugar de tránsito como de destino. Organizaciones han intervenido proporcionando ayuda humanitaria inmediata, así como apoyo en protección, salud mental y regularización migratoria, fortaleciendo capacidades para mejorar sosteniblemente las condiciones de vida de refugiados y migrantes.

Hiromi Porlles

Coordinadora de Encuentros SJM Tacna

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Las fronteras son puntos de intensa interacción social, económica y política, con flujos constantes de personas y bienes que crean un entorno multicultural y económicamente interdependiente. Sin embargo, esta dinámica también conlleva desafíos como la migración irregular, el riesgo de trata y tráfico ilícito de migrantes, así como el contrabando, agravados por diferencias en políticas migratorias y comerciales entre los países.

En la triple frontera, cientos de familias refugiadas y migrantes enfrentan diversas problemáticas. Muchas buscan establecerse en Chile o retornar a Venezuela tras proyectos migratorios frustrados, mientras otros inician desplazamientos hacia Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida. Las restricciones migratorias más recientes, como la exigencia de la Visa Democrática para venezolanos en Chile desde 2019, han generado tensiones adicionales y llevado a situaciones como acampadas en espera de respuesta gubernamental en la línea Concordia.

Cristian Mauricio Neves Layche

Promotor Comunitario Senior

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Las fronteras son puntos de intensa interacción social, económica y política, con flujos constantes de personas y bienes que crean un entorno multicultural y económicamente interdependiente. Sin embargo, esta dinámica también conlleva desafíos como la migración irregular, el riesgo de trata y tráfico ilícito de migrantes, así como el contrabando, agravados por diferencias en políticas migratorias y comerciales entre los países.

En la triple frontera, cientos de familias refugiadas y migrantes enfrentan diversas problemáticas. Muchas buscan establecerse en Chile o retornar a Venezuela tras proyectos migratorios frustrados, mientras otros inician desplazamientos hacia Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida. Las restricciones migratorias más recientes, como la exigencia de la Visa Democrática para venezolanos en Chile desde 2019, han generado tensiones adicionales y llevado a situaciones como acampadas en espera de respuesta gubernamental en la línea Concordia.

Ficha técnica del Boletín “Tiempo de Encuentros”

Edición: Área de incidencia política
Ruth Huarancca – rhuarancca@encuentros-sjs.org

Diseño gráfico: Área de Comunicaciones
Angel Túpac – ltupac@encuentros-sjs.org

Encuentros Servicio Jesuita a Migrantes Perú
Jr. Fulgencio Valdez 780, Breña
981 224 821 – Clínica Jurídica Pedro Arrupe SJ.