La respuesta estatal a los desafíos de regularización y la atención de la salud mental
A partir del 2013 se inicia el ingreso de venezolanos y venezolanas al Perú y desde el 2016 se incrementa la cantidad de ingresos de manera acelerada y sostenida en el tiempo1. Para finales de 2023, se estima que alrededor de 1,6 millones de personas refugiadas y migrantes de Venezuela residirán en Perú, manteniéndolo como segundo país de acogida luego de Colombia2. De igual forma, Lima-Callao, cuentan con más de un millón de personas refugiadas y migrantes de Venezuela, y es la ciudad extranjera con mayor número de personas venezolanas viviendo fuera de su país de origen3. De toda esta población, actualmente el 60% no cuenta con un documento de estancia regular válido loque limita el acceso a los derechos, servicios esenciales e impide una integración completa de la población a la sociedad.